Aprendizaje automático supervisado frente a semisupervisado frente a no supervisado
Hay tres tipos de aprendizaje automático que debes recordar: aprendizaje automático supervisado, semisupervisado y no supervisado. Como hemos explicado, el aprendizaje automático depende de los datos que el humano le introduzca para entrenar su comportamiento. El aprendizaje supervisado etiqueta todos los datos con la respuesta.
Por desgracia, no siempre es posible utilizar datos etiquetados. El aprendizaje no supervisado es un modelo de aprendizaje con un conjunto de datos que no incluye instrucciones. Este conjunto de datos es una colección de ejemplos sin un resultado deseado. En resumen, el equipo no se alimenta con la respuesta correcta.
En su lugar, la máquina debe encontrar una forma de estructurar los datos y extraer características útiles analizándolos. El modelo de aprendizaje automático no supervisado organiza los datos de varias maneras, entre ellas:
- Agrupación: la agrupación permite a las máquinas extraer conclusiones basadas en los datos dados. Mediante grupos cerrados de datos de formación, extraen algunas conclusiones.
- Detección de anomalías: la detección de anomalías puede ordenar los datos y encontrar instancias de una ruptura del patrón.
- Asociación: la asociación permite a las máquinas determinar qué nuevos datos deben agruparse en función de los datos de formación.
La diferencia entre el aprendizaje supervisado y no supervisado es que el no supervisado es menos preciso porque no se ha entrenado con las respuestas correctas.
El último tipo de aprendizaje automático es el semisupervisado, que es un tipo intermedio entre un aprendizaje supervisado preciso y un aprendizaje no supervisado menos preciso. El aprendizaje semisupervisado requiere un conjunto de datos de entrenamiento con datos etiquetados y sin etiquetar. Después, aprende lo que puede de los datos etiquetados y extrae conclusiones de los datos no etiquetados.
El aprendizaje automático aumenta tu rendimiento, gracias a que un equipo analiza grandes conjuntos de datos por ti. El aprendizaje automático supervisado tiene varias ventajas para tu empresa, entre ellas:
Mejora de la toma de decisiones
El aprendizaje automático supervisado es preciso porque ya conoce las respuestas gracias a los datos de entrenamiento. Dado que se basa principalmente en reglas, solo coincide con los registros que se ajustan a las condiciones adecuadas.
Por ejemplo, puedes utilizarlo para segmentar clientes en función de su edad y saber que es correcto porque ya le has dicho qué hacer y cómo hacerlo. El aprendizaje automático supervisado se puede utilizar para realizar predicciones financieras más precisas, ya que consume un número ilimitado de datos que puede ordenar mucho más rápido que un ser humano, lo que permite tomar mejores decisiones basadas en datos sin errores.
El aprendizaje automático supervisado puede mejorar la información de tus clientes para ayudarte a aprender más sobre su comportamiento. El aprendizaje automático te permite analizar la información que has recopilado de los clientes, incluidos los comportamientos y compras recientes, e interpretarlos.
Ahorra tiempo
Filtrar los datos requiere mucho tiempo, y los seres humanos cometen errores fácilmente. El aprendizaje automático supervisado simplifica la entrada de datos para mitigar los riesgos asociados con errores contables o de mantenimiento de libros. También te puede ayudar a calcular el valor vitalicio del cliente.
Por ejemplo, puedes utilizar los datos para aprender sobre los comportamientos de los clientes y predecir la probabilidad de conversiones.
Desafíos del aprendizaje automático
Por desgracia, el aprendizaje automático supervisado no es perfecto. Presenta varios desafíos, entre ellos los siguientes:
Sesgo de los datos
Hay muchos tipos de sesgos en las estadísticas que se pueden integrar en el aprendizaje automático y la inteligencia artificial. Dado que el aprendizaje supervisado depende de un conjunto de datos para las respuestas, es fácil que se creen sesgos que pasen desapercibidos.
El sesgo del aprendizaje automático, o el sesgo de la inteligencia artificial, se produce dentro de los modelos de aprendizaje supervisado debido a las suposiciones que han hecho durante el aprendizaje.
Esta parcialidad puede provocar desequilibrios en los datos y problemas para evaluarlos y proporcionar predicciones precisas. Además, los seres humanos evalúan los resultados y pueden crear sus propios sesgos al leer los datos recopilados por el aprendizaje automático.
Mala calidad de los datos
Los datos desempeñan un papel importante en el comportamiento de los modelos de formación supervisados. Si les das datos de mala calidad, tendrán un resultado de mala calidad.
Para que las máquinas aprendan, debe haber suficientes datos. El aprendizaje automático es sofisticado, pero no tanto como el cerebro humano (todavía). De modo que requiere toneladas de datos para aprender, incluidos miles de ejemplos y respuestas.
No tener suficientes datos significa obtener resultados inexactos porque el ordenador se basa en ejemplos y debe recibir la respuesta para hacerlo bien cada vez.
Precio
El aprendizaje automático es caro y puede ser difícil encontrar un técnico de datos. Las máquinas supervisadas se basan en millones de ejemplos, que requieren mucho tiempo y son caras.