Muchos dueños de negocios conocen el valor de los datos, incluso si no pueden ponerle una cifra. Los datos, ya sea sobre lo que compran los clientes, cómo compran o de qué hablan en las redes sociales, son valiosos. Pueden ayudar a dar forma a lo que una empresa produce o comercializa.
Los datos deben desempeñar un papel importante en cada decisión de marketing que tome una empresa, especialmente cuando cada céntimo invertido en publicidad cuenta. El marketing basado en datos crea una oportunidad para que cada campaña de marketing brinde un mayor retorno de la inversión (ROI).
¿Por qué importa tanto el marketing de datos? El marketing, en general, ha cambiado en la última década. Ya no basta con tener una gran idea, como daban por hecho las antiguas agencias de publicidad. Una simple corazonada o un presentimiento no son suficientes para ayudar a generar grandes oleadas en las ventas. Sin embargo, al aplicar todos los datos disponibles para crear una estrategia, es posible producir campañas de marketing mucho más relevantes, efectivas y valiosas.
Es difícil creer que los datos puedan marcar una diferencia tan grande. Sin embargo, se ha demostrado una y otra vez a lo largo de los años. Compruébalo por ti mismo aprendiendo más sobre cómo poder aprovechar el marketing basado en datos en esta guía.
¿Qué es el marketing basado en datos?
La gran pregunta que muchos se hacen es, “¿qué es el marketing basado en datos?”. La respuesta corta es que es una forma de marketing que se basa en la información o los datos del cliente para crear una campaña de marketing. Mediante el uso de los datos de los clientes, es posible predecir sus necesidades, así como sus deseos y los tipos de comportamientos en los que es probable que participen. Esto incluye lo que puede que compren. Al aprovechar los datos, es posible crear estrategias de marketing más personalizadas que logren el nivel más alto de ROI.
Una buena manera de comprender cómo funciona el marketing basado en datos es considerar cómo se diferencia de los métodos tradicionales. Tradicionalmente, el marketing tiene dos objetivos. El primero es determinar cuáles son las necesidades del cliente. Luego, el marketing usa esa información para entregar lo que el cliente necesita de la mejor manera posible.